1-SEPT| Festividad de Sant’Egidio, el santo que da nombre a nuestra Comunidad
Hoy celebramos la festividad del Santo que da nombre a nuestra Comunidad. El abad San Gil, venerado cada 1 de septiembre, es también conocido como Sant’Egidio, patrón de los leprosos, de los tullidos y de los tejedores. La iglesia de San Egidio de Roma fue el primer lugar de oración de nuestra Comunidad.
A lo largo de su vida, fechada entre el siglo VII y VIII, se rodeó de pobres, mendigos, campesinos, enfermos aquejados de todo tipo de dolencias, náufragos, así como personas poseídas por demonios.
Alcanzó gran veneración por ser protector de los peregrinos en la Edad Media, época en la que surgieron varias iglesias dedicadas a él a lo largo de las antiguas vías de peregrinación desde Francia a Alemania y de Polonia a Italia. Los escasos testimonios de su vida narran que se convirtió en un poderoso intercesor gracias a su oración.
La tradición explica que Sant’Egidio se había retirado a vivir como ermitaño en un lugar desierto en compañía de una cierva que le daba su leche. Durante una batida de caza, el animal se salvó porque Egidio interpuso su cuerpo ante la flecha lanzada por un cazador, imagen con la que tradicionalmente es representado, y que simboliza la naturaleza amenazada por la voracidad del hombre y que fue protegida por su mano.
Quince siglos después, en un momento marcado por la guerra y una crisis económica derivada de la pandemia, el testimonio y legado de Sant’Egidio representa una invitación para cuidar a tantos peregrinos que se quedan al margen del camino, tal y como lo hizo el Santo que da nombre a nuestra Comunidad.