Corredores humanitarios en Europa: historia de un modelo de acogida e integración
En Sant’Egidio no hemos querido resignarnos ante el drama del Mediterráneo, y por ello hace unos años tuvimos el sueño de que fuera posible abrir vías seguras y legales para todos los que huyen de las guerras. Así, trabajando en el marco del derecho comunitario encontramos el artículo 25 del Reglamento número 810/2009 del 13 julio de 2009 que prevé que los estados miembros puedan conceder visados humanitarios para el propio territorio. Todas las personas a las que se les conceden estos visados humanitarios sufren, además de su condición de solicitantes de refugio, situaciones de vulnerabilidad específicas como ancianos, mujeres, familias con niños, discapacitados, enfermos, etc.
El primer paso fue el 15 de diciembre de 2015, cuando firmamos un protocolo con las Iglesias Evangélicas Italianas y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Italia para ofrecer una primera acogida de 1.000 refugiados procedentes de los campos de Líbano. El 12 de junio de 2017 firmamos otro protocolo con el gobierno italiano, en colaboración con la Conferencia Episcopal Italiana, para la acogida de 500 prófugos procedentes de campos de refugiados en Etiopía, en su mayoría somalíes y eritreos. Ambos protocolos se han renovado y ampliado para la acogida de otros 1.000 refugiados procedentes de Líbano, y en el segundo caso para seiscientos visados humanitarios de personas procedentes de Jordania, Etiopía y Níger.
Es importante destacar que los corredores humanitarios son fruto de la solidaridad ciudadana, y que son completamente autofinanciados por Sant’Egidio y el resto de las entidades promotoras, y que prevén la acogida integral desde el momento de la llegada a Europa con itinerarios de formación específicos que incluyen la enseñanza de la lengua, la inscripción en la escuela para los niños, cursos de formación y capacitación laboral, etc.
De hecho, el éxito de los corredores humanitarios en Italia ha hecho posible que Sant’Egidio replique el modelo en otros países como Francia, Andorra o Bélgica, tal y como indicamos en la siguiente tabla.
En estos momentos en Sant’Egidio seguimos trabajando para que se abran corredores humanitarios en otros países, como en España, pero también que Europa asuma este modelo humanitario como modelo seguro y solidario con el que la sociedad civil desea asumir la responsabilidad de la vida de todos los que tienen que huir de la guerra en muchas partes del mundo.
