Andrea Riccardi: mantenemos la esperanza hacia Siria. No podemos perder la esperanza de una solución política al conflicto.
“La confirmación por boca de la Ministra de Exteriores Emma Bonino, que el periodista Domenico Quirico, secuestrado en Siria el pasado 9 de abril está vivo, es la única buena noticia que nos llega desde este país maltratado, que parece condenado a una masacre sin final.
Y, por desgracia, no hay ningún desarrollo positivo que se conozca sobre la suerte de los dos obispos de Alepo, el sirio-ortodoxo Mar Gregorios Ibrahim y el greco-ortodoxo Paul Yazigi, también secuestrados y cuyo destino desconocemos”. Lo declaró Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de Sant’Egidio.
“Una diplomacia internacional hasta ahora impotente – continua Riccardi – que sólo ha podido registrar las cifras de un verdadero desastre humanitario en Siria: cien mil muertos, cuatro millones de refugiados y el riesgo de un contagio al vecino Líbano. Sin embargo, no podemos abandonar la esperanza de una resolución pacífica del conflicto, para la que en primer lugar Europa debe gastar todas sus energías. La experiencia de la Comunidad de Sant’Egidio nos ha demostrato que la guerra no puede ser considerada como una salida de dolorosa necesidad, y que, en cambio, también en las situaciones más graves, como la actual, se pueden construir las razones de la paz y se debe preparar mediante el diálogo, el terreno para un desarrollo democrático. Se espera que la conferencia de Ginebra II se lleve a cabo con este espíritu de hacer pasos hacia adelante”.