Avanzan las obras de la “Casa de la Cultura y Solidaridad de Sant’Egidio” en Madrid
¿Y si los pobres tuvieran en pleno centro de Madrid un nuevo espacio de acogida e inclusión? ¿Y si hubiera un punto de encuentro entre quienes necesitan ayuda y quienes quieren ayudar? ¿Y si el extranjero que quiere aprender el idioma y la cultura española tuviera un sitio para hacerlo y a la vez encontrar acogida e integración? ¿Y si las personas sin hogar tuvieran un sitio cómodo donde asearse y lavar su ropa en condiciones dignas? ¿Y si los ancianos solos y sin recursos, que tanto han sufrido con la pandemia COVID19, tuvieran un espacio para vivir en un ambiente familiar? ¿Y si los niños de los barrios vulnerables tuvieran un local para sus clases de apoyo escolar y convivencia?
Son preguntas muy concretas que tienen algo en común: una visión de solidaridad, de fraternidad y de convivencia, una respuesta al conformismo, el pesimismo y al confinamiento espiritual que muchas veces se apodera de nuestra sociedad.
Preguntas que hoy están más cerca de tener una respuesta positiva para muchas personas en dificultad, un sueño que se va haciendo realidad detrás de las paredes de un edificio que antes estaba en desuso y que hoy se ha convertido en esperanza con la conclusión de las obras de rehabilitación y acondicionamiento de la tercera planta que servirá para la atención de familias migrantes a través de la Escuela de Lengua y Cultura Española.
La reestructuración de un edificio cedido por la Archidiócesis de Madrid a la Comunidad de Sant’Egidio ha convertido unas viejas y abandonadas paredes en la nueva “Casa de la Cultura y la Solidaridad de Sant’Egidio” en Madrid, un espacio de convivencia y punto de encuentro entre jóvenes, niños y ancianos, madrileños y nuevos europeos, niños/as y adultos, gente diversa pero que comparte el mismo sueño: una ciudad más humana y fraterna en la que se podamos encontrarnos aunque seamos diferentes.
El edificio consta de cinco plantas que se se han reformado para albergar un centro de día para personas sin hogar, que cuenta con salas, cocina, lavandería y baños con duchas; un centro de formación de lengua y cultura española para refugiados y extranjeros con diferentes aulas para la enseñanza y para cursos que apoyen la inserción laboral de los migrantes, así como biblioteca y despachos para seguimiento personalizado.
Una planta completa se dedicará a una casa hogar para ancianos/as sin recursos y sin familia para que puedan vivir en un ambiente familiar y otra se destinará a la acogida de personas y familias extranjeras y/o en situación de exclusión social, así como para un comedor. Y también albergará un espacio amplio para la Escuela de la Paz, donde niños y jóvenes aprenden a convivir y reciben apoyo escolar, así como para la integración de «nuevos europeos» a través de una escuela de lengua y cultura para personas migrantes.
Estas obras nacieron de una visión- algunos la llamarían utopía—la de vivir juntos en una ciudad que puede ser un espacio de convivencia, encuentro y aprendizaje entre personas diferentes, entre el que ayuda y el que es ayudado. Esta visión se hace realidad con el trabajo conjunto y con la solidaridad de personas, empresas y organizaciones que apuestan por una nueva manera de vivir en la ciudad.
Desde aquí hacemos un llamamiento a todos quienes quieran convertirse en padrinos y madrinas de la Casa de la Solidaridad de Sant’Egidio en Madrid a través de una aportación regular que, una vez terminadas las obras, nos permita poner a punto los últimos detalles, mobiliario e insumos para el día a día de las actividades que allí se desarrollarán. Juntos estamos construyendo el sueño de una ciudad más humana y acogedora, venciendo la tentación del individualismo y del «sálvese quien pueda».
✅QUIERO SER MADRINA O PADRINO DE LA CASA DE LA SOLIDARIDAD (🖱️CLIC AQUÍ)
✅DESCARGA FORMULARIO PARA DOMICILIAR TU APORTE (🖱️CLIC AQUÍ)
Agradecemos a estas instituciones que han ayudado a hacer realidad este proyecto solidario: