Navidad para todos: un Belén de carne y hueso en Madrid (Primeras imágenes)
Belén es todo lugar donde quien no tiene sitio encuentra cobijo, una comida caliente, un gesto de cariño o una sonrisa. Belén es todo lugar donde puede nacer la esperanza de un tiempo nuevo y mejor.
Hace dos mil años nació en Belén nuestro Salvador encarnado en un niño pobre y con frío, como tantos que duermen en la calle. Tuvo que nacer en un pesebre porque no había un sitio para él, como tantos migrantes que buscan futuro en nuestra Europa de puertas cerradas. Sus padres no fueron recibidos, como sucede tantas veces con familias que viven en los márgenes. Nuestro Dios se hizo carne en la fragilidad, porque se reconoce en todos aquellos que no encuentran «posada» en nuestro mundo y en nuestra ciudad.
El día de Navidad en la Comunidad de Sant’Egidio en Madrid quisimos hacer un Belén, invitando a una comida caliente y un regalo nuevo a más de mil personas con las que compartimos a lo largo del año: nuestros «amigos de la calle» (personas sin hogar), familias necesitadas que participan en los repartos de alimentos, familias de nuestras Escuelas de la Paz y escuelas de idiomas, nuevos europeos, migrantes y ancianos que están solos.
La celebración de esta Navidad para todos empezó con la Eucaristía en la Iglesia Nuestra Señora de las Maravillas, presidida por el vicario episcopal Javier Cuevas, que en su homilía destacó que Dios se hizo niño frágil y pobre para despertar la ternura en nuestros corazones. Y siendo más humanos, nos acercamos a los pequeños, a los pobres, a los ancianos y a todos los que viven en la oscuridad. «Que no se nos olvide que el amor de Dios se encarna en la pequeñez de un niño que nace en las perifierias de la ciudad para hacernos más humanos».
Una vez concluida la Eucaristía, tal y como hicimos el primer año de la pandemia, guardando todas las medidas sanitarias, repartimos un menú con comida caliente, dulces navideños, embutidos, bebidas a unas mil personas que se acercaron a tres puntos de reparto en el centro de Madrid, a pesar de la lluvia.
Asimismo, con la máxima precaución y medidas anti-COVID (mascarillas, distancia, certificado COVID y test de antígenos), realizamos una comida en la Iglesia Ntra. Señora de las Maravillas con familias de las Escuelas de la Paz, algunos amigos de la calle, migrantes y ancianos solos. El cardenal arzobispo de Madrid, don Carlos Osoro se acercó para saludar personalmente y felicitar la Navidad a los asistentes.
Además, los Jóvenes por la Paz de la Comunidad de Sant’Egidio fueron a las casas de los niños de las Escuelas de la Paz para felicitar la Navidad y llevarles en persona el almuerzo navideño, sus regalos y el cariño de siempre.
Desde aquí queremos agradecer a todas las personas que como los pastores y los Reyes de Oriente, se pusieron en marcha para llegar al pesebre y vivir una auténtica Navidad. Gracias a quienes a lo largo de estas semanas han estado cocinando el menú navideño, organizando los embutidos, forrando los regalos, haciendo los adornos, cargando muchas cajas y repartiendo todo lo necesario para que esta Navidad de la esperanza haya sido una realidad.
Creemos firmemente que este puede ser el comienzo de una nueva historia, en la que todo es posible a partir de la Navidad. Hoy ha sido el día en que quien está solo encontró compañía, quien tenía miedo, encontró consuelo o quien está en la calle recibió un gesto de amistad y un regalo inesperado.
A continuación, las primeras imágenes de esta Navidad para todos con la Comunidad de Sant’Egidio en Madrid (clic sobre la imagen para ver la galería). El próximo 16 de enero a las 17.30 hrs. en la Iglesia Ntra. Señora de las Maravillas nos volveremos a encontrar para ver juntos más imágenes y videos de este momento y reflexionar sobre su significado en la construcción de un nuevo y mejor tiempo.